Me hice amiga de MI cáncer

Yo me hice amiga del cáncer, fue un proceso difícil, pero imprescindible para mi recuperación.


Llegar a esto requirió pasar por etapas y lo primero fue hacerme amiga de la quimioterapia. Recuerdo cuando me diagnosticaron el cáncer, era tan evidente la gravedad de mi cuadro que el Dr. sin aún tener la biopsia, sólo con mamografía y ecotomografía en mano, me dijo que iba a pasar por todas las etapas en la curación del cáncer. Me habló de la operación(mastectomía total), quimioterapia y radioterapia.





Que nombres tan raros pensé, de que se tratará cada uno de ellos, sólo a la voz de operación mi corazón se aceleró, pues le tengo fobias a las operaciones. Recuerdo que escuchaba como hablaban los médicos y yo estaba como flotando en la escena, todo eso me lo estaban diciendo a mi?. Había escuchado de estas terapias mas de alguna vez, pero era algo tan lejano, algo que pensaba nunca me tocaría vivir a mí.





Cuando llegué a la Fundación a empezar mi tratamiento, me preguntaron por cual terapia empezábamos, operación y quimioterapia o quimioterapia y operación, estaba claro que debía pasar por ambas. Confieso que fue el miedo a la operación la que me hizo escoger empezar por la quimioterapia.





Algún día traspasaré los escritos que hice día a día durante mi enfermedad, aún no soy capaz de leerlos sin ponerme a llorar, son demasiados fuertes, y me parece que vuelvo a experimentar los dolores, los olores, las sensaciones. Porque yo escribí durante todo el tiempo, obviamente cuando mi cuerpo me lo permitía. Fue un consejo de mi marido, el cual cree que algún día podré escribir un libro, que le sirva de ayuda a otros pacientes.


 


Bueno una aproximación a eso es lo que estoy haciendo con este blog. Es que nosotros buscamos literatura que nos ayudara a entender lo que estábamos viviendo, y no nos gustó lo que encontramos. Por lo general las personas escriben contando lo que pasaron pero después de algún tiempo, y claro la mente es sabia y olvida o atenúa las cosas, sobretodo cuando son traumáticas, a menudo uno tiende a decir, no si no fue para tanto....... y mas que nada demuestran que se puede salir airoso, que todo es superable, y eso está bien, da esperanzas, pero yo quería saber si realmente otros sentían lo que yo estaba sintiendo, si no era alharaca, yo me sentía tan mal y quería saber si esto era así de verdad.


 


Cada sesión de quimioterapia era tan angustiante para mí, ahí empecé a leer mis libros de autoayuda, y durante las 3 0 4 horas que duraba el proceso en que me inyectaban la droga, me acuerdo que trataba de aplicar lo aprendido. Ese color anaranjado que me parecía horroroso, lo cambiaba por verde, y me convencía de que ese líquido verde me recorría todo el cuerpo sanándome. Debo reconocer que ahora escribiendo esto y recordando esos momentos, mi estómago se aprieta y me dan nauseas, y me afloran las lágrimas.





Cuando entre la segunda y tercera quimioterapia fui a hablar con mi Dra. y le dije que no quería más, que no siguiéramos con el tratamiento, ella me convenció de que no valía la pena morir, mi tumor ya se había reducido unos centímetros y habían esperanzas. Ese momento me decidí a hacerme amiga de la quimioterapia. Dejé de pensar en lo terrible que era y me dediqué a trabajar sobre el tumor, había que reducirlo, tenía que llegar a eliminarlo totalmente y salvarme de la operación, esa era mi meta.


 


Recuerdo "el Secreto" un libro que llegó a mis manos, que ahora está muy de moda, ahí decía que "sanar mediante la mente puede actuar armoniosamente junto con la medicina clásica. Si hay dolor, la medicación puede hacer que el dolor desaparezca, lo que ayudará a la persona a concentrarse más en su salud".


También decía lo que ya hablaba en mi artículo anterior:


- Que la risa es la mejor medicina.


- Que el amor y la gratitud pueden disolver cualquier enfermedad


- Que no podía permitirme ningún estrés porque eso es una de las peores cosas que pueden pasar mientras estás intentando curarte


- Hay tres cosas fundamentales "el poder de la gratitud para sanar; el poder de la fe para recibir y el poder de la risa y la felicidad para disolver la enfermedad en nuestro cuerpo"


- "La enfermedad no puede subsistir en un cuerpo que se encuentra en un estado emocionalmente saludable"


- "Visualízate viviendo en un cuerpo perfectamente sano. Haz que el médico cuide de tu enfermedad"



 


Esta última frase fue la que hizo en mí un clic y me dije, desde hoy estoy sana, y me hice amiga de la quimioterapia, deje que la medicina hiciera su tarea y yo hacía la mía. Y recuerdo que en cada control la Dra. me miraba y me escuchaba sonriéndose, cuando yo llegaba y le decía, el tumor está mas pequeño yo estoy trabajando en eso y no me van a tener que operar.

Y me hacía el examen físico y efectivamente el tumor había disminuido, 
y es así como mi tumor desapareció completamente! 
 


Eso sí, no me salvé de la operación pero eso lo contaré en una próxima nota.

---------------- o ----------------

Bajo esta línea puedes leer comentarios que han hecho las visitas de esta publicación, o hacer los tuyos propios